Se van definiendo y encontrando los personajes, a través de las propuestas que los actores nos hacen llegar. Esos arquetipos desglosados en el guión, con metáforas, palabreríos y diálogos inconclusos, tienen que saltar del papel a la realidad de la historia. Aquel personaje que surgió por otro relato, que se fue transformando, cambiando ideales y objetivos. Transmutando de personalidad en personalidad, de historias felices e infancias dolorosas, ahora tiene un "porque", un "a donde va", "que quiere", "en que cree", "que sueña"...
Y ahora, que el personaje ideado encontró el cuerpo en donde encaja mejor, sigue transformándose… Carlos se hizo cuerpo en Pablo Vecchio.-
Aunque en verdad Carlos necesita de otro cuerpo cuando sus sueños nacen a borbotón, creciendo en ilusiones porque nunca serán realidad. Desde otro lugar, Carlos es otro tipo, es Luís…con otros objetivos, con otros sueños, con otros ideales totalmente opuestos a los suyos y cuando se enfrentan lo superan incontrolablemente.
Luís se hizo cuerpo en Marcelo Pereyra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario